Los aparcamientos y áreas de ocio de estos espacios quedarán regulados, de manera que, cuando la ocupación llegue al 75%, se activará un operativo para prevenir aglomeraciones, coordinado por el CECAT, con el cuerpo de los Mossos, el cuerpo de Agentes Rurales, Protección Civil, la policía municipal, la Cruz Roja, el personal del parque natural y otros colectivos, haciendo circular los vehículos, que no podrán restar los arcenes, y cortando accesos, si es necesario. Donde sea posible, los paneles informativos de las vías de acceso informarán sobre el nivel de ocupación del Parque Natural.

Se podrá acceder a pie o en bicicleta sin limitaciones, o mediante el Bus de los Volcanes, que hace parada en los principales puntos de partida de los itinerarios que permiten adentrarse en la zona central del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa.

Las limitaciones que comienzan este fin de semana en la Garrotxa son complementarios a la tarea que el Parque Natural y Consorci de l'Alta Garrotxa hace desde hace tiempo. La ordenación de los vehículos y el control de acceso son estrategias que desde hace unos años se ha querido controlar el territorio. La situación de pandemia ha llevado, finalmente, a endurecer estas tareas para evitar aglomeraciones en espacios concretos.