Una ruta dura y exigente por algunos de los parajes más abruptos de la Alta Garrotxa.
El itinerario comienza en la parte superior de la calle Mayor de Oix. Vamos dirección la Vall del Bac saliendo del pueblo, hacia la izquierda. La ruta está marcada en verde y naranja. Coincide también con el GR1 también encontraremos las marcas amarillas de la Red Itinerànnia. La pista pasa por un riachuelo y por detrás del Vilar de Oix. Cerca de la casa de Rodeja tendremos unas buenas vistas del Montmajor y el Montpetit. Dejamos el camino del cementerio y iremos planeando hasta que pasaremos junto al Mas del Horno, que dejamos a la derecha. Cruzamos el vado y seguimos subiendo por la pista en dirección a Cal Quic. Una vez estamos en el desvío de Cal Quic, vamos en dirección al valle del Bac por el bosque del Quer: este tramo no coincide con el GR, pero sí encontraremos las marcas verdes y naranjas, y también las amarillas de Itinerànnia.
El sendero va paralelo al torrente y lo seguiremos hasta cruzarla. Unos metros más abajo, están las pozas d'en Batlle. Seguiremos hacia poniente hasta cruzar también el torrente de la Vinyota. El camino llega a un prado de donde sale un antiguo camino carretero, y lo seguiremos hasta atravesar el torrente del Seguer de Pera. No mucho más allá que buscar un camino que sube a la derecha y dejar el camino carretero. Subiremos por el sendero y más tarde por una pista que zigzaguea hasta llegar a la casa del Saguer. Unos cincuenta metros hacia poniente de la casa sale un sendero bien fresado que al principio desciende y más tarde se bifurca: tomaremos el de la derecha y lo seguiremos hasta encontrar la fuente de la Solana del Seguer.
Siguiendo hacia poniente, atravesaremos una tartera y el torrente del Clot del Rebost. El camino pasa junto a unas peñas y el Picat, desde donde se puede tener la última visión del vecindario de Pera. En la siguiente bifurcación de caminos, tomamos el de la izquierda y empezamos a bajar. Si cogiéramos el de la derecha, podríamos subir a Llonganya y el Talló. Atravesamos el riego de la Llonganya (con avellanos y tilos) y, sin bajar, ascenderemos al otro lado, donde encontraremos el molino de la Coromina.
En lo alto de las escaleras del Molí, seguiremos unos metros el sendero que bordea el arroyo, por debajo de la pista que llega a la casa. Más tarde llegamos a la pista que luego cruza el torrente por un vado y esclusa: no debemos atravesar, sino que seguiremos en la misma dirección hasta llegar a Cal Ferrer. Al margen del arroyo tocando a falta Ferrer está la fuente. Atravesaremos el arroyo por una palanca. A la derecha encontraremos la carretera que va a la Torre, que dejaremos de lado y seguiremos hasta llegar al Hostal de la Vall del Bac.
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